Recuperé algunos textos antiguos, muy antiguos, sobre ser uno mismo, sobre quererse , sobre que te de igual esa gente que siempre te va a criticar,pq cuanto más te quieres más van a intentar que no te gustes.

Recuperé estos textos porque leí a una chica joven que parece ser que está atravesando todas esas cosas por las que yo tanto he alzado la voz y hace tiempo que no hablo. Me hizo pensar que aún es necesario, que aunque a veces pienso que ya hemos superado esa etapa, no lo hemos hecho.

Sigo encontrándome las mismas mierdas, personas que dicen como tienen que ser, cómo tienen que sentir, cómo y con qué intensidad deben de querer.

Así que desempolvamos esos textos que hacía tiempo que no leía y nos fuimos al Monumental a leerlos.

Fue raro, porque esa forma de escribir está tan lejos de como ahora escribo, e incluso diría que mi forma de sentir, por desgracia, está lejos de algunos de esos versos.

Me recuerda cuando fui a un concierto de Celtas cortos que decía que había pasado 20 años de una de sus letras y seguía siendo super contemporáneo ese mensaje. Pues o escribo nuevos textos, o arreglo los viejos, o seguiré recuperando versos de mi pasado, que siguen resonando en este futuro.

Los textos que leí en esta ocasión fueron Niña No-pájaro y Mala, dos grandes clásicos que siempre me van a acompañar.

Tu mensaje: